La detección de incendios debe ser temprana y robusta, con una gestión de la información precisa, rápida, integral y coordinada.
Los sistemas de detección de incendios han de funcionar no sólo de forma autónoma sino interaccionar con el resto de elementos de seguridad.
La protección de las personas en edificios de alta ocupación y, también, la protección de los bienes de almacenamiento y producción en la industria, requieren que los detectores automáticos de incendios sean cada vez más avanzados. En este sentido, desde Cottés apostamos por la instalación de sistemas de detección de incendios inteligentes, capaces de administrar y tramitar información de forma veloz y eficaz y siempre con el objetivo de que los datos, actuaciones e integraciones con el resto del edificio formen un engranaje perfecto. Desde un sistema de evacuación y guiado inteligente, hasta la operación de puertas cortafuegos, compuertas en conductos, arranque o parada de sistemas, control de humos, señalización dinámica, etc.
Los sistemas automáticos de detección de incendios deben ser el cerebro de las operaciones para la extinción de los mismos y, por tanto, han de actuar como tal: son la red neuronal que hace reaccionar al edificio de una forma rápida y eficaz. Nosotros ponemos en valor el ir un paso más allá de lo que se ha hecho hasta el momento y, por eso, añadimos la gestión de datos e información para la toma de decisiones como elementos fundamentales para conseguir una mayor eficiencia de los sistemas de detección de incendios.
Central de incendios con gestión gráfica:
En Cottés aplicamos cálculos avanzados para dotar de mayor efectividad a la central contra incendios convencional y las hacemos más amigables con entornos gráficos que se muestran en un ordenador y que representan el plano del edificio y dónde está ocurriendo la emergencia. Convertimos, por tanto, la clásica central de incendios en un sistema inteligente de gestión gráfica de incendios. Es decir, una central contra incendios que combina sus funciones con gestión gráfica, análisis de datos en sensores y la comunicación directa con los servicios de emergencia para aportar un valor añadido: un sistema de gestión y comunicación de incendios más avanzado.
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Sistemas de detección de incendios y sus beneficios
- Rápida detección de un incendio
- Los sistemas automáticos de detección de incendios son el primer aviso de que hay un incendio y, por tanto, permiten que se actúe antes y más rápido sobre él minimizando al máximo los posibles daños. Con ellos, se detecta el incendio antes de que empiece a expandirse peligrosamente y puede llegar a evitar el uso de otros sistemas como los rociadores automáticos.
- Mayor eficacia
- Gracias a la rápida actuación de los detectores automáticos de incendios, se consigue una mayor eficacia en la toma de decisiones como cerrar compuertas, accionar control de humo o generar señales de evacuación. Por lo tanto, con un sistema de detección de incendios fiable y rápido se protege mucho mejor a las personas y a los bienes de cualquier espacio.
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